Ambiente laboral en tiempos de COVID-19

Por: Yenisey Valles

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En las organizaciones, es momento de fortalecer el ambiente laboral para afrontar los retos venideros, pues las consecuencias de la pandemia siguen materializándose y la amenaza de un rebrote continúa latente.

Durante el 2020, el ambiente de trabajo se ha modificado radicalmente para todas las empresas: por un lado, están las que continuaron operando en sus instalaciones y debieron adoptar múltiples medidas para proteger a sus trabajadores; por el otro, las que suspendieron labores y hoy están adaptándose a la nueva normalidad.

Pero también está un tercer grupo, conformado por las compañías que pudieron continuar trabajando mediante el home office, con todos los desafíos de operación, comunicación, productividad y bienestar laboral que la distancia les plantea.

Para todos ellos, y las empresas que están por venir, el ambiente laboral se constituye como uno de los principales activos a cuidar, pues solamente así estarán preparadas para superar la crisis y aprovechar las nuevas oportunidades con resiliencia.

Importancia del ambiente laboral en tiempos de crisis

Ya que hablamos de resiliencia, recordaremos que esta cualidad se vive precisamente a través de la cultura organizacional. Una empresa no obtiene su resiliencia mediante resultados económicos ni intercambios comerciales, sino a través de las actitudes y conductas que fomenta entre sus propios trabajadores y directivos.

Afortunadamente, este principio fundamental no ha cambiado con la crisis económica actual. Los líderes de las empresas son responsables de reconocer el valor de todos sus colaboradores, quienes constituyen el capital más valioso, como nos recuerda este artículo de Forbes.

Pero la actual emergencia sanitaria añade un argumento más para cuidar la gestión del clima laboral. Y es que los trabajadores necesitan certidumbre y un sentido de protección por parte de sus empresas en tiempos de inestabilidad y duelo.

En particular, los equipos de trabajo requieren acompañamiento por parte de sus líderes o empleadores, para transitar con éxito hacia la llamada «nueva normalidad», como refiere un webinar sobre el tema, de la Universidad de Lima. Incluso, si la gestión es positiva, pueden aumentar los niveles de compromiso y desempeño del personal.

Opinión de los trabajadores en esta crisis

En general, en México los trabajadores han mostrado alta capacidad de adaptación ante la crisis, según una encuesta realizada entre más de 5 mil trabajadores, por No Surrender.

Sin embargo, quienes realizan trabajo remoto valoran de manera más positiva a su empresa:

  • Los colaboradores que hacen home office respondieron en general muy positivamente a todas las preguntas sobre su trabajo.
  • El trabajo remoto es aceptado por todos los trabajadores.
  • Quienes laboran a distancia por primera vez opinan que su productividad es tan positiva como antes.
  • El 65% de quienes no teletrabajan desearían hacerlo.

Por otro lado, las personas más desmotivadas son en su mayoría quienes no teletrabajan, del género femenino y que no cuentan con personas a su cargo.

En todos los casos, la principal área de oportunidad para el ambiente laboral está en el liderazgo, pues el aspecto peor calificado es precisamente la gestión de los equipos por parte de los jefes directos.

Consideraciones de alta prioridad

Ahora bien, ¿qué aspectos deberíamos empezar a fortalecer de inmediato en la gestión de la fuerza laboral? De acuerdo con PwC México, tres temas son de alta prioridad:

1. Garantizar la seguridad de las personas

En primer lugar, hay que establecer las medidas de respuesta ante colaboradores enfermos y protocolos para los viajes. Todo esto es adicional a las políticas que debemos implementar como parte de la NOM 035 contra los factores de riesgo psicosocial.

2. Comunicar de manera veraz y efectiva

La comunicación interna, que siempre ha sido compleja, ahora también debe brindar certidumbre, adaptarse a los nuevos medios de trabajo, entregar la información urgente y crear espacios de diálogo a la distancia.

Específicamente, la comunicación de crisis nos plantea estos desafíos:

  • Asegurar la disponibilidad de la red para todos los colaboradores
  • Documentar los resultados y procesos
  • Crear espacios colaborativos
  • Realizar consultas con el área legal para comprender las responsabilidades que los trabajadores pueden asumir con el trabajo a distancia

3. La capacidad de trabajo remoto

Es crucial desarrollar un modelo de trabajo remoto que ayude a alcanzar los resultados de manera óptima, al mismo tiempo que favorece el ambiente laboral.

Aun para las empresas que trabajan en el mismo espacio físico, es prudente contar con un plan para trasladar su trabajo de oficina a las casas de los colaboradores, en caso de un rebrote.

Por supuesto, no se trata únicamente de seleccionar las herramientas colaborativas, sino también de establecer los horarios, mecanismos de retroalimentación y canales para efectuar las reuniones.

Claves para un buen ambiente de trabajo en plena pandemia

Para las empresas, cuidar el talento humano es crucial, no solo porque es una obligación establecida en la mencionada norma contra el estrés laboral, sino porque velar por su bienestar nos ayudará a salir adelante. Estas son algunas claves para lograrlo:

1. Monitorear el clima laboral

Realizar un diagnóstico para conocer las inquietudes, preocupaciones y expectativas de los trabajadores.

2. Escuchar a todos los colaboradores

Crear foros o espacios de participación donde todos puedan opinar y ayudar a identificar los problemas de la empresa, así como crear alternativas de solución. Un ejemplo lo constituyen los llamados espacios AMA (Ask Me Anything), en los que el líder da pie a que le pregunten cualquier cosa sobre la organización.

3. Compartir la información

Socializar las informaciones clave de la compañía, como sus resultados, los retos, los próximos cambios y las expectativas de los líderes.

4. Fortalecer la comunicación

Implementar los canales más adecuados para cubrir las distintas necesidades de comunicación, tanto para realizar el trabajo como para abrir espacios de escucha. Crear políticas concretas para la colaboración; por ejemplo, que todos mantengan su cámara encendida en las reuniones.

5. Brindar retroalimentación

Aun entre los colaboradores que cuenten con un perfil ideal para el teletrabajo, la pérdida de enfoque y la desmotivación son amenazas latentes. El antídoto perfecto está en el acompañamiento y la retroalimentación por parte de los líderes.

Formas de mejorar la comunicación remota

Debido a que el home office llegó para quedarse, los equipos deben hacer el esfuerzo para que se sienta como una modalidad permanente y no como una medida temporal ante la crisis, explicó el académico Cristian Salazar en el webinar «Teletrabajo y comunicación efectiva».

Entre las recomendaciones principales para que la comunicación contribuya a un buen ambiente laboral, destacan:

1. Usar distintos canales de comunicación

  • Los líderes pueden enviar correos personales o dirigidos a cada equipo de trabajo, para compartirles que están a disposición de conversar en caso de algún problema o duda.
  • Mensualmente, enviar un newsletter interno para compartir información importante sobre la empresa. Se puede lanzar una convocatoria para pedir a los empleados que compartan fotos o testimonios sobre sus experiencias de trabajo en la pandemia.

2. Ser accesibles

La transparencia es clave para un buen ambiente de trabajo, sobre todo en el esquema remoto. Compartir la información y hacer que esté accesible para los colaboradores, disminuye la incertidumbre y ayuda a prevenir el estrés laboral.

3. Desayunos mensuales

Retomar los espacios comunes, a través de comidas o desayunos virtuales. Aprovechar estos momentos para compartir noticias positivas y los proyectos de la empresa.

Conclusión

De acuerdo con Runa, el software de nómina, los departamentos de Recursos Humanos son pieza clave en momentos de crisis, pues en sus manos está crear certidumbre, motivar, comunicar expectativas, brindar directrices de trabajo, ayudar a gestionar el home office, asegurar la implementación de las medidas de salud e higiene y fortalecer a los equipos de trabajo, por mencionar solo algunas de sus funciones.

Es importante precisar que los cambios que implementemos entre la fuerza laboral, deben quedar incorporados en los reglamentos internos de trabajo. De esta forma, tendrán validez y contaremos con el respaldo de las autoridades laborales.

Finalmente, recordemos que una gestión que se apoye en la transparencia y la comunicación efectiva nos ayudará a generar un ambiente laboral positivo, en el que sea sencillo alinear esfuerzos y contar con la colaboración de cada empleado para obtener los resultados deseados.

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¡Hasta la próxima!

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